Nació el 20 de Marzo del 2004 y cumpliría ocho años dentro de poco, y digo cumpliría, porque las circunstancias han querido que La Taberna La Bernarda no llegue a esa fecha. Así es, los detalles que nos rodean a veces parece que se empeñan en ponerlo todo del revés, impidiendo que las cosas sigan su cauce normal. Hay imponderables que no se pueden salvar por ir contra corriente, y cuando sabes que al final de esa corriente te espera un enorme salto, que puede acabar contigo y con tu futuro, no puedes menos que retroceder y buscar otro camino.
Hace meses, antes de que comenzara a complicarse el estado de salud de José Luis, no hubiera imaginado que hoy hablaría en estos términos y que llegaría a decirle adiós a la querida taberna que él ideó y donde pasó muchos de sus mejores momentos. Sus amigos le decían que su taberna era como su "juguetito". Y efectivamente lo era, un juguete que cuidaba y mimaba con esmero y con el que consiguió acercar a muchas personas, con el que llevó a cabo una forma peculiar de manejar su negocio, donde los clientes eran siempre los protagonistas.
Ahora me los encuentro por la calle y me preguntan cuándo abro la taberna. Les digo que no podré abrir nunca y se lamentan. Les explico los imponderables a los que me enfrento y lo entienden, porque efectivamente hay imponderables contra los que no se puede luchar. La verdad es que con muy poco apoyo la taberna hubiera podido seguir adelante, pero alrededor de ella hay connotaciones que lo han complicado todo de tal manera, que la posibilidad de volver a abrir se ha vuelto un imposible.
Si JL está viendo todo esto, lo estará lamentando profundamente, pero también comprenderá las circunstancias y estará de acuerdo con nuestra decisión. Porque él sabe, como yo, que sólo una circunstancia hubiera podido salvar la taberna, y aunque la hemos estado esperando hasta el último momento, no ha llegado a producirse. Es una pena porque hubiera sido un bonito homenaje para él.
Este mes La Bernarda quedará vacía por completo y nada de lo que fue podrá volver a ser una realidad. Quizá si las circunstancias cambian, algún día la Taberna La Bernarda pueda resurgir en otro lugar de sus cenizas, aunque sin José Luis ya no sería lo mismo.
4 comentarios:
¿Ya es definitivo?
Sólo, muchos Besicos
Estimada amiga Sofi,
És un grand placer poder te visitar otra vez. Continuas com tu bello sitio.
Regards de Brazil.
Geraldo
Si no ocurre algo inesperado sí, es definitivo, al menos con esta menda lerenda.
Lo siento Sofi, es una lástima. Un abrazo y suerte para el futuro.
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