Como recordaréis los que seguís este blog, hace unos meses publiqué un post titulado La noche del vestido rosa. Hacía alusión a la historia de un vestido, que la víspera de una función se rompió y tuvieron que volver a coserlo deprisa y corriendo. Seguid el enlace y releer la historia.
Pues bien, la vida que da muchas vueltas ha hecho llegar a mis manos una foto que hubiera ilustrado el relato a la perfección. Una instantánea tomada en una de las representaciones de aquel bonito baile. En ella aparece en primer lugar, vestida de rosa totalmente, la niña protagonista del relato, y también aparezco yo, detrás a su derecha en la primera fila.
Han pasado muchos años, y me debo estar haciendo mayor, porque el recuerdo, que me ha traído esta foto me ha dado mucha alegría. Es posible que las demás niñas de la foto visiten un día este blog y se vean reflejadas y sientan la misma alegría. La noche del vestido rosa fue mágica para todas y recordarla ha sido estupendo. Un saludo desde este blog para todas ellas.
1 comentario:
Yo también tengo una foto de arqueología infantil en el pecezarrio,¡aaaaaah, como pasan los añooooooos!
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