Hace tiempo que no nos vamos de excursión. Claro, con el frío y la lluvia ha sido casi imposible caminar por el monte.Antes de que se nuble, vamos a preparar una excursión a algún lugar no demasiado lejos, para ir haciendo pierna.
Saliendo desde Biescas, por tomar un punto de partida, en la Taberna La Bernarda nos reunimos y recorriendo la calle Mayor, llegamos al puente. Lo cruzamos y llegamos a la Rambla de San Pedro que termina en la Avenida de Zaragoza. Llegados a este punto, avanzamos hacia la izquierda, o sea dirección Sabiñánigo, y continuamos hasta el final de la calle. Los que no conocen la zona, tienen que darse cuenta de no confundir la avenida de Zaragoza con la del Manzano, ya que hay una bifurcación donde confluyen ambas, y continuar por la izquierda hasta el final.
Una vez llegados al barranco, tomamos la pista de la derecha, que durante casi todo el camino va marcando el desnivel. Se recomienda hacer esta excursión a primera hora de la mañana o a última de la tarde, ya que el sol de las horas centrales podría desanimarnos en el ascenso, que aunque no es muy pronunciado, será duro para quienes no tengan demasiada experiencia.
Avanzamos por la pista, observando el paisaje y escuchando el rumor del agua el barranco, que, en primavera sobre todo, es impresionante. La pista zigzaguea unas cuantas vueltas, aunque no hay demasiado trozo hasta las Señoritas, el total de todo el recorrido desde Biescas puede ser de alrededor de una hora.
En la pista encontraremos una fuente, de donde mana bastante agua en esta época.Es el momento de mojar los labios, aunque sin beber con demasiado afán, que esto podría perjudicarnos.
Finalmente llegamos a un mirador, desde donde divisaremos las dos enormes chimeneas que todos llaman Las señoritas de Arás.
En el mirador hay unos bancos, donde podemos descansar un rato mientras contemplamos el entorno, que es digno de verse.
(Si mientras la subida, escucháis ruido por los matorrales, no tengáis miedo, son sólo jabalíes)
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