Desde ayer lo estamos oyendo en los medios, el gobierno ha adoptado nuevas medidas anticrisis. Entre ellas la suspensión de la ayuda de 400 euros, que es la que ha calado más. Y se entiende, ya que muchas personas se van a ver perjudicadas por esta medida tan drástica. Pero hay que entender que, como todos sabemos, porque todos conocemos algunos casos, quizá esta medida era necesaria para paliar la picaresca a que había dado lugar. Demasiadas personas cobrando el subsidio, muchas de ellas que lo necesitaban de veras para comer; pero muchas otras que, aprovechando sus diferentes coyunturas,lo estaban cobrando sin necesitarlo, para irse de vacaciones o comprarse algún caprichito. Muchos de ellos, casos de parejas sin legalizar por ejemplo, pero formando unidades familiares con ingresos muy por encima de lo que marca la ley para cobrar el subsidio.
¡Allá ellos con sus conciencias!, pero si hubieran sido más solidarios, es posible que la gente que lo necesita para comer, hubiera podido seguir cobrando más tiempo.
Pero tampoco hay que reprochar a esta gente lo que hace, porque si cada día ven cómo el gobierno usa y abusa de las arcas, es normal que se contagien y que piensen "¡qué son 400 euros comparados con lo que derrocha el gobierno!
Y no me refiero al derroche diario, sino al derroche que se va acumulando año tras año, tantas pensiones vitalicias de tanta gente, que ha pasado por el gobierno de este país, tantas jubilaciones millonarias, tanto gasto en imagen, tanto sueldo de asesores, que han demostrado una de dos, no tener ni idea, o no saberse hacer oir por el virrey de la Moncloa.....se podrían enumerar tantas y tantas cosas, que no terminaríamos.
Y desde este espacio nos preguntamos ¿a qué está esperando el gobierno para dar ejemplo?
Y para responder, nuestro presidente se dedica a suscitar la inquietud de los ciudadanos, que no sabemos por qué, sin venir a cuento, no se ha presentado en la cumbre Iberoamericana y permite, que hagamos cientos de conjeturas, que justifiquen su actitud, aumentando más la intranquilidad si cabe, ante la situación crítica que nos está tocando vivir. Es posible que no vaya a la cumbre, porque se haya cansado de hacer el ridículo, es posible que le haya entrado miedo escénico, es posible que necesite este tiempo para hacer las maletas y, mientras elucubramos, pirárselas al Caribe, seguramente para buscar a Curro y que le de la solución a sus problemas.
Pero algunos se preguntan, que si se va y no vuelve qué pasará entonces. Pues que no teman nada, que si eso pasa, como éste es un país de pandereta, llamaremos a Belén Esteban y que gobierne, seguro que saca votos a montones. ¡Total a peor no podemos ir!
Ahora hablando en serio, seguro que dentro de los partidos actuales, existe gente preparada y capacitada para gobernar (otra cosa es que les dejen), que nada tienen que ver con las especies paleolíticas, que actualmente nos gobiernan. La savia joven está esperando para emerger, pero de momento, permanecen escondidos mirando de reojo, pensando si se tiran o no a la piscina. Y tienen para todo, porque si deciden tirarse, no saben lo que les espera. ¡Pobrecitos los del próximo gobierno! que después de celebrar que habrán ganado, pronto dejaran de hacerlo, seguramente como Mas, que después de tanta celebración ya se ha quedado calladito.
Otra solución es aguantar cuatro años lo que caiga y esperar a que La Porta siga ganando escaños, que seguro que termina gobernando, porque si en cuatro meses de partido ha conseguido cuatro escaños, en cuatro años no te quiero contar hasta dónde es capaz de llegar. No nos lo habíamos planteado antes, pero es posible que el futuro de este país esté en manos del fútbol.Que alguien se lo diga al Presidente, que a falta de mejores ideas, ésta promete.
¡Visca el Barça!¡ aupa el Madrid!
¡Zaragoza es el mejor!