Acaban de beatificarle ayer en Granada y más de cien mil personas asistieron al evento, tras acreditarse y abonar el donativo obligatorio que iba de diez a veinte euros. A fray Leopoldo le llamaban el limosnero de Dios, pero las autoridades católicas le han hecho un flaco favor, cobrando esos euros por asistir a su beatificación. Aquí hay algo que no concuerda mucho. Como tampoco concuerda que, en estos tiempos de crisis, se hayan desperdiciado mil quinientos euros en la organización de esta beatificación, que podría haber esperado a tiempos mejores, o, como hubiera querido probablemente el beato Leopoldo, que no se hubiera llevado a cabo nunca.
Pero las cosas de la Iglesia y sus incongruencias son así. Y para incongruencia los comentarios del oficiante de la misa, sobre la guerra civil, comentarios partidistas y políticos se miren como se miren, hablando de frailes y monjas asesinadas, pero olvidando que en el bando contrario se cometieron atrocidades, que no dejan atrás a estas nombradas en la homilía. Pero este señor debe tener la memoria algo dispersa, ya que ha olvidado que también murieron frailes a manos de la derecha de entonces. o ¿no?.
Simplemente me parece que éste no era el momento de hacer tales comentarios, que en definitiva, no añadían ni quitaban nada al comportamiento del beato.
No creo, con lo poco que sé sobre fray Leopoldo, que en estos momentos se sienta muy orgullo de la fiesta, que le han montado y del derroche de medios, que en cambio si que le hubieran hecho falta en vida, para asistir a tantos pobres, como asistió y ayudó sin tener con qué.
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1 comentario:
En esto de la guerra civil,los levantados eran los atacantes,osea que el otro bando eran los atacados,osea las victimas,asi que no me parece justo igualar a los dos bandos,todas las desgracias de la contienda son de los insurrectos,en consecuencia.
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