jueves, 21 de febrero de 2008

Excursión al Monasterio de S.Pelay


Hoy hace un día soleado y, después de tantos días con nubes y llovizneando, me ha parecido bien contar una de las rutas de pequeño recorrido, que se pueden hacer desde Biescas. Se trata de ir al Monasterio de S.Pelay, en realidad son ruinas de un antiguo monasterio, del que queda ya poco, pero siempre es interesante para los visitantes.
Para llegar al Monasterio iremos en primer lugar a la calle Mayor de Biescas y desde allí nos dirigiremos a la calle Preciados, (justo en la esquina hay un restaurante que se llama La Zarcinera) al terminar la calle llegaremos a un puente sobre un canal y seguiremos todo recto, en pocos minutos llegaremos a una bifurcación de caminos y deberemos tomar el que sigue recto dirección al cementerio.
Después de pasar dicho cementerio, iremos por el mismo camino hasta que lleguemos a otra bifurcación de caminos, nos dirigiremos al de la derecha, que es una carretera que va a Espierre y Barbenuta, y ,después de cruzar por otro puente,desde el que se divisa el barranco de Sia, seguiremos por ella hasta que encontremos una pista forestal a la izquierda que va a Yésero. Tanto las bifurcaciones anteriores, como las pistas forestales están señalizadas, así que no hay peligro de perderse.
Y una vez tomada la pista solo es cuestión de seguir pista arriba , hasta que encontremos un sendero a la derecha señalizado, que llega al Monasterio, que encontraremos bajo un toldo metálico protegido de las inclemencias del tiempo.
El recorrido desde Biescas cuesta entre hora y hora y media, dependiendo de la velocidad de la marcha. Es un bonito paseo en el que pueden disfrutar de varios tipos de paisaje,veremos el barranco de Sia,árboles, y justo en el Monasterio algo más frondoso, húmedo y verde. Una delicia para la vista de los amantes del Pirineo. Espero que os guste. La foto es un tramo de camino hacia el cementerio, a la salida de Biescas

1 comentario:

JoseAngel dijo...

Me encantan las fotos de Biescas que pones. Relaja la cabeza el verlas a los que tanto hemos paseado por allí pero ahora vamos poquito... yo las veo y casi me siento allí; hasta sé los ruidos que se oyen en ese sitio.